En un lugar de la web de cuyo nombre no quiero acordarme...
Buenas. Bienvenido sea el que bien viniere.
No sé qué voy a hacer en este espacio que he creado. A lo largo de los próximos posteos iré viendo. Si pueden, ténganme paciencia. Si no, qué se le va a hacer...
Me va a hacer emocionar, Cuti. Le agradezco muchísimo, no tanto por la recomendación, sino más que nada por tratarme al blog de predilecto. La verdad es que casi siempre me balanceo en la incertidumbre de cuánto valor podrán tener todas estas cosas que posteo acá, y casi nunca me convenzo de que no son insignificantes. Pero que venga a decir aquello usted, autor de uno de mis blogs de cabecera, me parece una indudable señal de que tan mal no ando. El razonamiento que me lleva a esa opinión comienza así: alguien que escribe tan bien no ha de tener tan mal gusto.
3 comentarios:
Estimado, en mi blog le digo algo acerca del suyo.
Me va a hacer emocionar, Cuti. Le agradezco muchísimo, no tanto por la recomendación, sino más que nada por tratarme al blog de predilecto. La verdad es que casi siempre me balanceo en la incertidumbre de cuánto valor podrán tener todas estas cosas que posteo acá, y casi nunca me convenzo de que no son insignificantes. Pero que venga a decir aquello usted, autor de uno de mis blogs de cabecera, me parece una indudable señal de que tan mal no ando. El razonamiento que me lleva a esa opinión comienza así: alguien que escribe tan bien no ha de tener tan mal gusto.
Tenga un abrazo, compañero.
Bueno, mire, su primera premisa seguramente es incorrecta (en sus dos términos), pero el hecho es que su blog es uno de mis favoritos. Eso.
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